Despedida de Busuanga

Como los niños que juegan a ser médicos, bomberos o policías, nosotros nos hemos permitido durante unas semanas jugar a que somos Divemasters en Filipinas. Y es un juego que nos ha divertido tanto como nos ha enseñado. Nos muestra que hay ciertas personas que frente a la disyuntiva entre tener dinero y comodidades o tener una vida interesante donde cada día es una aventura, y dónde cada pocos meses puedes vivir en un país diferente, eligen la segunda.

Mientras abandonamos la que ha sido nuestra casa durante casi un mes en un jeepney abarrotado, cientos de recuerdos se agolpan en nuestra cabeza; anécdotas y aventuras diarias que estarán por siempre ligadas a nuestra vida en Busuanga. No somos capaces de procesar lo mágico de este momento, pero me doy cuenta de que lo es porque Sonia sonríe de oreja a oreja mientras se le escapa alguna lágrima. Pocas emociones son capaces de dibujar en la cara a la vez dos expresiones tan contrarias.

La resaca por la fiesta de esta última noche y la falta de sueño tampoco ayudan a ordenar nuestros pensamientos. De todas las pruebas obligatorias a superar en nuestro curso reservaban una de las más complicadas para el final: el snorkel test. Básicamente este último examen se basa en beberte una botella entera de ron rebajado con tang de limón, también llamado jungle juice, por el tubo de snorkel. La dificultad estriba en que con las gafas impidiendo la respiración y la boca totalmente llena del líquido que baja desde el embudo de la parte superior del tubo, las únicas dos opciones son beber o morir asfixiado. Por supuesto nuestro exigente entrenamiento nos permitió superar la prueba con éxito.

Aunque bastante etílica, nuestra despedida de los instructores, de la isla, de los maravillosos pecios y de las encantadoras gentes de Busuanga fue el colofón ideal con el que decir adiós a esta experiencia intentando sobrellevar la alegría, la tristeza, la nostalgia y la resaca que se mezclan en nuestras cabezas por partes iguales. Entre tanto, empezamos también a pensar en nuestro próximo y último destino en este viaje: Hong Kong.

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